El huevo, con su perfecta
arquitectura. Urna esteril capaz de proteger el milagro de la vida, parte
fundamental en el proceso de creación, espectador de la transformación de ovulo
a embrion y de ahí a polluelo, reptil, araña... es tanta y tan diversa la vida
que alberga.
El huevo concavo o convexo, maravilloso y misterioso, matriz e incuvadora de vida, también nos ofrece otra infinidad de opociones en nuestra cocina. Y es que a partir del huevo hay tantas y tantas cosas que podemos cocinar que se podría dedicar un libro entero a él y sus posibilidades.
Hoy con los huevos como base vamos a cocinar un postre muy sencillo crema volteada. Mi amiga Isabel, a la que tuve la dicha de alojar unos días, me enseñó una vez más, a preparar algo rico, rápido y sencillo.
Y vamos a por la receta.
Ingredientes:
-500 gr de Leche condensada
-500 gr de Leche evaporada
- 8 huevos grandes
- caramelo para el molde
Preparación:
1. Preparamos el molde, cubrimos el fondo con el caramelo y reservamos.
2. Precalentamos el horno a 180ºC
3. En un procesador de alimentos (o a mano) mezclamos la leche evaporada con los huevos, y posteriormente añadimos la leche condensada. Una vez esten todos los ingredientes integrados vertemos la mezcla en el molde que previamente habremos cubierto de caramelo.
4. Llevamos al horno, el tiempo de horneado son aproximadamente 40 minitos, siempre dependiendo del horno serán unos minutos más o menos. Estará listo cuando al pincharlo con el palillo salga limpio.
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